Fecha de publicación: Enero de 2016
El informe señala que la actual crisis no ha afectado de la misma manera en todos los países a los esfuerzos dedicados a actividades innovadoras, de las cuales la I+D es una componente relevante y decisiva. Utilizando datos del gasto en I+D en la OCDE, de los 49 países miembros sólo 19 han declarado menos gastos en esta actividad en 2013 que en 2008 y España figura en el quinto puesto cuando se los ordena de mayor a menor reducción. Según el informe, como regla general los países con economías claramente dependientes del conocimiento han tenido una reacción rápida y positiva, con incrementos entre los años citados, y descontada la inflación, que en la mayoría de los casos superan el 5% y que pueden llegar a tener dos dígitos en países realmente comprometidos.