Fecha de publicación: Septiembre de 2015
El informe señala que, en sectores como los de energía, salud, bienes industriales y logística, muchas empresas no han considerado la implantación de tecnologías digitales porque carecen de la mentalidad en la organización y de las capacidades necesarias para tener éxito. Estas compañías que tardan en adoptar las tecnologías necesitan aplicar el concepto de fracasar rápido sin perder mucho dinero, desarrollando su experiencia y sus capacidades digitales mediante un marco de transformación en tres etapas. La primera se basa en la idea de que la velocidad es más importante que la perfección. Las empresas deberían poner el marcha iniciativas digitales a pequeña escala para mejorar la experiencia de cliente, sacando al mercado nuevos productos y servicios, y digitalizando procesos internos. Una vez que hayan identificado iniciativas digitales prometedoras, en la segunda etapa las compañías necesitan ampliar su dimensión y establecer el modelo organizativo correcto para integrarlas con las operaciones existentes. Según el informe, y en la tercera etapa, la transformación digital exitosa requiere un fuerte liderazgo, el alineamiento entre las áreas de TI y de negocio, y una cultura interna que promueva la asunción de riesgos y la actuación rápida.
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